Uno de los beneficios de la proteína de soja más destacados es su capacidad para mejorar la digestión. Gracias a su alto aporte de vitaminas del grupo B, interviene en los procesos enzimáticos que ayudan a tener un óptimo proceso digestivo.
Además, participa en la síntesis de ácidos grasos y ayuda a optimizar el funcionamiento del sistema inmunitario. Lo mejor es que no contiene lactosa y evita crisis inflamatorias en el intestino. (Seguir Leyendo)