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La policía de Concordia, en Entre Ríos, Argentina, se encuentra investigando un grave error cometido por personal de un hospital local, quienes habrían incinerado el cuerpo de un bebé que nació muerto en el nosocomio al colocar sus restos al interior de una bolsa para desechos patogénicos.
Según informa el periódico El Universal, este hecho ocurrió entre el lunes 14 y martes 15 de marzo en el hospital “Delicia Concepción Masvernat” y en estos momentos, las autoridades se encuentran investigando si este caso se trató de una omisión, si fue un acto malicioso o de algún acto carente de profesionalismo.
Según la investigación, en la cual se han incluido grabaciones de las cámaras de seguridad de este hospital, a una joven originaria de una localidad que se encuentra a unos 60 km de esta ciudad se le practicó una cesárea en donde desafortunadamente, el bebé nació sin vida.
Luego de recibir la dura noticia, los padres del pequeño decidieron conocerlo y vestirlo con la ropa que le llevaban para luego, trasladarlo a su localidad en donde celebrarían su sepelio.
Por protocolo, el cuerpo del bebé fue enviado a la morgue, en donde debía permanecer unas 24 horas antes de ser entregado a sus familiares. Al siguiente día, al llegar los empleados de la funeraria que sus padres contrataron, descubrieron que el cuerpo no se encontraba ahí y no existía algún registro de salida.
Rápidamente, apoyados por un abogado, los padres averiguaron que por error, su bebé había sido puesto en una bolsa roja, la cual se utiliza para colocar ahí residuos patológicos, misma que fue incinerada por simple protocolo.
La dirección de este hospital también se encuentra investigando este penoso asunto.
Eldiariony
